Ingredientes

  • 1 barra de pan del día anterior o una barra específica para torrijas (de venta en casi todas las panaderias o incluso en algun que otro supermercado).
  • 1 L y medio de leche entera.
  • 5 huevos medianos.
  • 1 palo de canela-rama, 1 vaina de vainilla, la cáscara de medio limón.
  • 100 ml de vino de Oporto.
  • 300 g de azúcar blanca y 1 cucharada de canela molida.
  • 1/2 l de aceite de oliva virgen extra https://aceites-echinac.com/tienda/aceite-de-oliva-virgen-extra-1-l-15-uds-x-1-litro/

Preparación de la leche infusionada

  1. El primer paso es preparar los ingredientes con los que vamos a aromatizar la leche. Lavamos muy bien el limón y pelamos su piel de manera fina, sin mucho blanco que luego nos amargue el postre.
  2. Para esta receta vamos a necesitar la vaina abierta entera, no es necesario añadir el interior, es decir las semillas, estas las podemos guardar para otro postre.
  3. Para sacarle el mayor provecho, cortamos los extremos, la parte más ancha de la vaina con un cuchillo, la rajamos de un extremo al otro, abriéndola como un libro. Raspamos el interior con la hoja de un cuchillo (lo mejor es abrirla bien con los dedos y rasparla con la mitad de la hoja del cuchillo), así sacaremos las semillas que vamos a guardar.
  4. La vaina limpia es la que vamos a añadir a la leche.

Reposo de la leche infusionada

  1. Dejamos todo en reposo durante 5 minutos, es decir, infusionando la leche. La leche debe estar tibia o fría cuando la empleemos para empapar las torrijas. Reservamos.

Cómo hacer las torrijas caseras

  1. Escogemos un recipiente cómodo para ir mojando el pan elegido para las torrijas y lo llenamos con la leche infusionada y fría que tenemos reservada. Añadimos (paso opcional) el vino de Oporto que le va a dar el puntazo a este postre y batimos con un tenedor para mezclar bien los líquidos.
  2. Batimos los huevos hasta que espumen un poco y añadimos dos cucharadas de leche infusionada, volvemos a batir y colocamos en otro plato que sea cómodo para mojar las torrijas antes de freír. Ponemos una sartén con aceite de oliva virgen extra y calentamos a fuego medio. Mientras se calienta el aceite bañamos las rebanadas de pan en la leche infusionada.
  3. Le damos la vuelta para que se impregnen bien pero que no chorreen y la pasamos por el huevo batido que ya tenemos preparado. De ahí directamente a la sartén con aceite bien caliente.

Fritura y presentación final de las torrijas de leche

  1. Freímos las torrijas por todos dos lados hasta que estén doradas. Nos ayudamos de un tenedor para ir dando la vuelta a la torrija. Retiramos a un plato con papel de cocina absorbente para retirar el exceso de aceite.
  2. Llenamos un recipiente ancho con azúcar y canela en polvo. Unas dos cucharaditas de canela en polvo por cada 100 gramos de azúcar. Mezclamos bien con un tenedor. Rebozamos las torrijas en esa mezcla, que se impregnen bien de azúcar y canela.
  3. Dejamos enfriar y degustamos a temperatura ambiente o frías, simplemente deliciosas. Recordad que las torrijas están mejor de un día para otro. Como podéis ver en las fotos he dejado que sudaran. Así se recubren de una capita de almíbar dulce y suave que las hacen supremas. Vamos, de rechupete, no lo dudéis.