Si hay dos superalimentos por excelencia esos son el aceite de oliva virgen extra y la granada.

El aceite de oliva virgen extra es una grasa saludable que contiene polifenoles, como el oleocanthal, omega 3 y vitamina E, entre otras propiedades.

Todo esto se traduce en beneficios antioxidantes, antiinflamatorios y antimicrobianos. El aceite de oliva virgen extra está recomendado para cuidar la salud cardiovascular, para la prevención de la arterioesclerosis y para evitar el deterioro cognitivo. Asimismo, se recomienda en casos de fibromialgia, osteoartritis y osteoporosis, entre otras enfermedades.

La granada, por su parte, es rica en polifenoles, potasio y vitamina C. Por ello, entre sus beneficios destacan su actividad antioxidanteantiinflamatoria y antitumoral.

Si combinamos ambos alimentos, el aceite de oliva virgen extra y la granada, estaremos preparando un verdadero elixir para garantizar nuestra salud y calidad de vida.

Aunque a priori la granada puede parecer un alimento poco versátil en la cocina, nada más lejos de la realidad. Resulta el ingrediente adecuado para introducir en cualquier plato, ya que su sabor y textura combinan a la perfección con todo tipo de manjares.